Los rompecabezas son una excelente manera de ayudar al cerebro a funcionar correctamente más adelante en la vida, pero ¿qué beneficios tienen para los niños pequeños? Hemos encontrado algunos hechos clave para demostrar que los rompecabezas son el alimento perfecto para el cerebro, sin importar su edad.
Los psicólogos han determinado que el desarrollo del cerebro de un niño se ve significativamente influenciado cuando un niño actúa o manipula el mundo que lo rodea. Los rompecabezas brindan esa oportunidad clave. Los niños aprenden a trabajar directamente con su entorno y cambian su forma y apariencia cuando trabajan con rompecabezas.
Coordinación mano-ojo
Cuando los niños voltean, giran, quitan, etc. piezas del rompecabezas, están aprendiendo la conexión entre sus manos y sus ojos. Los ojos ven el rompecabezas, y luego el cerebro imagina cómo debe verse el rompecabezas o qué pieza debe encontrarse y colocarse. Luego, el cerebro, los ojos y las manos trabajan juntos para encontrar la pieza, manipularla en consecuencia y encajarla en el rompecabezas con precisión.
Las habilidades motoras finas
Similar a la forma en que se logra la coordinación mano-ojo, los rompecabezas brindan la oportunidad para que los niños desarrollen habilidades motoras finas. No debe confundirse con las habilidades motoras gruesas, como caminar, las habilidades motoras finas requieren movimientos pequeños y especializados que proporcionan los rompecabezas. Las habilidades motoras finas son necesarias para escribir a mano y otros logros importantes.
Habilidades motoras gruesas
Para bebés y niños pequeños, las habilidades motoras gruesas se pueden mejorar con bloques apilables y otros rompecabezas grandes y fáciles de manipular.
Resolución de problemas
La habilidad de resolver problemas de manera efectiva es valiosa e importante. Cuando un niño mira varias piezas y descubre dónde encajan o no, está desarrollando esta habilidad vital. ¡Después de todo, un rompecabezas no se puede completar haciendo trampa! O funciona y encaja o no. Entonces, los rompecabezas enseñan a los niños a usar sus propias mentes para descubrir cómo resolver problemas y pensar de manera lógica.
Reconocimiento de formas
Para los niños pequeños, incluso los bebés, aprender a reconocer y clasificar formas es una parte importante de su desarrollo. Los rompecabezas pueden ayudar a los más pequeños con esto, ya que las piezas deben reconocerse y clasificarse antes de poder ensamblarlas.
Memoria
Los rompecabezas simples y otros tipos de rompecabezas pueden ayudar a mejorar la memoria de un niño. Por ejemplo, un niño necesitará recordar el tamaño, el color y la forma de varias piezas mientras trabaja en el rompecabezas. Si una pieza no encaja, el niño la deja a un lado; pero él o ella tendrá que recordar esa pieza cuando sea necesario.
Establecer metas pequeñas
Cuando un niño trabaja en un rompecabezas, a menudo desarrollará una estrategia para resolver el rompecabezas de manera más rápida y eficiente. Él o ella puede hacer primero todas las piezas de los bordes, por ejemplo, o clasificar todas las piezas en montones de acuerdo con los colores o las formas. Esto ayuda a un niño a aprender a lograr metas pequeñas como un medio para lograr una meta más grande.
Trabajo en equipo
A veces, los niños aceptan el desafío de un rompecabezas más grande con un amigo. Un niño podría estar a cargo de encontrar los bordes exteriores mientras que otro se enfoca en un elemento dentro de él: la comunicación y resolver las cosas juntos es clave para completar el rompecabezas.
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